Puto Lunes...

Todos los lunes tienen algo mal, supongo que este es la factura que hay que pagar poder descansar dos días antes.

Primera contribución:

El sábado, fuimos cordialmente invitados a una reunión celebrando que el Gladys (Amigo de mi hermano el Niño Sapo) deja de pertenecer a las filas de los estudihambres para incorporarse a las bastas huestes de los felices desempleados que tan pronto ingresen al sector 7-G de alguna empresa que trabaje para la Bocho, borraran de sus caras las sonrisas para toda la eternidad.

Un pedo llegar, la colonia es un desmadre, como si Dios hubiera estado jugando y hubiera aventado gente desde arriba con todo y casas y donde cayeran, pues se chingaron y ahí se quedan.

Reunión modesta, familia, amigos, borrachines de fin de semana y carta abierta para servirse tacos al pastor y árabes (de los cuales supongo los árabes no tienen conocimiento de su existencia). Ahí empezó la perdición. algunas chelas y algunos tacos después dejamos la reunión justo cuando empezaba a arreciar la lluvia.

Apenas había dado vuelta a la derecha del obligado Oxxo de referencia (siempre hay un Oxxo de referencia) no advertí un pequeño señalamiento escondido detrás de un árbol que indicaba que no podía seguir de frente y claro, como era lógico, 5 metros después ya me esperaba impaciente un pinche tamarindo como espera un niño que ya sea de mañana el día de Reyes. Todavía intenté la maniobra de darme la vuelta en uvas pero entonces corrió lo mas rápido que su elevado colesterol le permitió para que no me escapara.

- Uuuuuuuuuyyyyyy joven (desfigurando sus labios de hígado encebollado), ¿ya se dio cuenta verdad?.

- (No pendejote, me gusta hacerle al rápido y furioso) Pues si, no vi ningún señalamiento.

- ¿Como no?, joven, esta ahí, detrás del árbol, junto al anuncio de la tiendita de la esquina donde está el camión del Electropura. Licencia y tarjeta de circulación si es usted tan amable.

- (Ah no, pues si, que pendejo soy, últimamente me ha estado fallando mi vista de rayos X) Pues ya que, ni modo.

- Mmmmm a ver -tratando de acordarse de sus lecciones de lectura de la primaria- ...Antes que nada, muy buenas tardes Señor Bilis Negra, ¿Verdad?

- (Antes que nada chinga tu madre y una felicitación por haber podido leer un nombre propio) Si soy yo -contesté tratando de hablar de ladito y sin abrir mucho el océano para que no notara las chelas que me había tomado-.

- Pues mi muy estimado caballero, voy a tener que hacerle su multa -me decía, mientras hacía cara de interesante y movía los ojos hacía su izquierda como tratando de decirme algo-.

Yo me hice como que no entendí sus las sutiles señas que me hacía con sus pizpiretos ojos saltones que parecían salirse de sus cuencas.

Se largó derrotado a su carcacha y todavía ahí se hizo pendejo como otros 5 minutos y cuando vio que no pensaba salir del carro vi por el retrovisor como mentaba madres y caminaba hacia mi para entregarme mi multa por circular en sentido contrario.

Segunda contribución:

Ayer, como todos los domingos, me dispuse a cumplir con mi actividad de macho deportista de fin de semana. Nueve de la mañana, solo 6 jugadores de nuestro equipo, es decir, exactos. 4 a 0 al medio tiempo como era de esperarse y todos dando las nalgas. Llegaron otros dos y los mas madreados en chinga agandallaron los cambios para descansar. El caso es que no salí en todo el juego y Dios es testigo de que es una chinga aguantar un partido de futbol rápido sin salir y sin dejar de correr y sobre todo si el equipo contrario tiene un promedio de edad de 10 años menos que yo.

Mala pinche suerte, tiros que no entraron, fallé un shut-out, un penal y justo cuando todo estaba perdido le pegué mal a un balón que se metió a la portería llorando de pena a 20 segundos de terminar. ¡A huevo! Gol mio, no importa que perdiéramos 5-1. Metí mi gol, lo demás me vale madres.

De ahí a un desayuno Buffet que bien podrían habernos cobrado doble.

Resultado de las contribuciones:

1). Hoy me duele todas y cada una de las articulaciones que pudieran dolerme.

2). Me duele la cabeza como si la hubiera metido en un cascanueces y todos mis alumnos y compañeros de trabajo presionaran los extremos del cascanueces cada vez que me hablan.

3). Desde que me levanté estoy cagando como regadera, lógico, un atracón de tacos el sábado y un desayuno buffet que me duró todo el domingo en tripas, estómago y cogote.

4). Sudo frío cada 10 minutos y a estas alturas yo creo que ya me deshidrate.

5). Tengo que pagar una multa de 8 salarios mínimos y yo creo que será mañana que me sienta mejor. No creo que soporte otro sobresalto por hoy.

Putos lunes.

Bytes.