lunes, septiembre 17, 2007

Felices fiestas paisanos.

Todavía no lo entiendo y probablemente nunca pueda. No entiendo eso de los sombreros enormes y ridículos, esos que parecen ser el emblema del mexicano en el extranjero con los que los gringos les gusta caricaturizarnos recargados en un nopal durmiendo. No entiendo las reuniones de las abundantes familias como si se tratara de navidad o año nuevo. No entiendo el hecho de sentirse muy mexicano tirando cantidades industriales de basura por las calles, ni entiendo las brabuconerías detonadas por el alcohol e impulsadas por un pretexto estúpido y mal entendido. No entiendo a los padres compartiendo el peligro con los hijos al salir por la noche a quemar "cuetes", actividad prohibida por cierto, mientras la sosobra de perder una mano o quemarse alguna parte del cuerpo los embarga y rematar dejando tirada en la calle una cantidad asombrosa de papel periódico. No entiendo como pueden celebrar una fecha en la que no saben que se celebra. No entiendo esa afición por comprar banderas y colocarlas en el cofre de un automovil para distinguirse como mexicanos cuando su actitud egoísta, animal y poco ortodoxa para tomar un volante ya los distingue como tales. No entiendo porque celebrar un día la liberación de un pedazo de tierra en el que nacimos por casualidad, pedazo de tierra que los 364 días restantes del año nos esforzamos por desaparecer. No entiendo el objetivo de sentirnos hermanados tan solo ese día por los colores de una bandera cuando nuestro comportamiento se rige por la regla "De que lloren en mi casa a que lloren en la de él, mejor que lloren en la de él". No entiendo como pueden sentir el patriotismo en sus venas cuando entonan un himno versando la frase "...Un soldado en cada hijo de Dios" o cuando se piensa que "Masiosare es un extraño enemigo". No entiendo la algarabía desbordada para "Dar el grito" cuando dos días antes se aprobó un aumento en la gasolina del 5.5%, pretexto justificable para dar un verdadero grito pero en el cielo.

¡¡¡Felices fiestas paisanos!!!


Finalmente el nopal terminó desplumando y tragándose al águila con todo y serpiente, ni las tunas dejó.

Nuevo diseño: Nopal devorando a un águila que intenta devorar una serpiente

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